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HELICOBACTER PYLORI: SE PUEDE DETECTAR POR EL ALIENTO

La infección por esta bacteria puede ser detectada con una prueba de aliento, de heces, de sangre y a través de una endoscopia.

Los dolores estomacales, como ardor, en la altura de la conocida “boca del estómago”, náuseas y eructos, son síntomas que Ana Moncada ha venido sufriendo hace ya varios años, los cuales se fueron intensificando por cambios en los hábitos alimenticios, horarios de comida, sumado a esto el estrés laboral y estudiantil.

Al igual que Ana, se estima que la mitad de la población mundial está infectada por Helicobacter Pylori, una enfermedad causada por una bacteria que se desarrolla en la mayoría de los casos en la infancia y que puede llegar a provocar gastritis, úlceras pépticas y hasta cáncer gástrico.

Anualmente, el cáncer gástrico produce más de un millón de muertes en el mundo y el 90% de esos tumores son secundarios a la infección por H. Pylori, bacteria que en 1994 fue declarada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como cancerígeno tipo I y que fue ratificada en 2010. Incluso, adicionalmente a la patología gástrica, es responsable de casos de anemia por deficiencia de hierro y vitamina B12, y trombocitopenia inmune.

Por otro lado, el Dr. Jorge Rodríguez, gastroenterólogo del Staff médico de Endoscopy Net by IECED aclara que “A pesar de que la bacteria Helicobacter Pylori es un factor importante en el desarrollo de gastritis, no es la única causa de la misma. No obstante, es una que siempre hay que considerar en cualquier persona con gastritis.” Según datos del Instituto Ecuatoriano de Enfermedades Digestivas (IECED), asegura que el 80% de los pacientes que el centro acostumbra atender al mes, es por un diagnóstico de gastritis. El Dr. Carlos Robles Medranda, Director de IECED explica que en Ecuador esta enfermedad es común y que lamentablemente en general se produce por los malos hábitos alimenticios, o por la infección causada por la bacteria Helicobacter Pylori.

La infección por Helicobacter Pylori se identifica por diversas pruebas, siendo las más eficaces la prueba de aliento, el examen de heces y el estudio de la biopsia de estómago tomada por endoscopia. En el laboratorio Labs ofrecen la prueba de aliento y explican su proceso “Esta prueba es rápida, indolora, sencilla y segura. Primero se le da al paciente un jugo de naranja para ingerir, luego trascurridos 10 minutos deberá soplar en una “bolsa recolectora”, para después ingerir otra bebida que es a base de urea y agua que se prepara en el laboratorio, luego deberá esperar 30 minutos más antes de soplar por segunda vez en otra bolsa recolectora, finalizando así la prueba, el proceso dura aproximadamente 40 minutos…”, afirma Fabricio Echeverría, jefe de laboratorio en Labs.

El Dr. Jorge Rodríguez, gastroenterólogo del staff de médicos de Endoscopy Net by IECED asegura que una vez detectada la infección se debe realizar cambios en la dieta para evitar mayores lesiones sobre el estómago. “De acuerdo a los síntomas puede ser necesario la realización de una endoscopia para detectar lesiones de mayor riesgo en el estómago como úlceras o cambios del tejido (metaplasia).”

Así también, es importante destacar que la infección puede ser eliminada, sin embargo, el tratamiento debe ser guiado por un médico, ya que existe mucha resistencia a antibióticos que dificultan tener un tratamiento eficaz.

Complicaciones

Las complicaciones relacionadas con la infección por Helicobacter Pylori más comunes son:

  • Úlceras. Puede dañar la mucosa protectora del estómago y del intestino delgado. Como consecuencia de esto, el ácido estomacal puede producir una llaga abierta (úlcera). Alrededor del 10 % de las personas puede desarrollar una úlcera.
  • Inflamación de la mucosa del estómago. La infección afecta al estómago y causa irritación e hinchazón (gastritis).
  • Cáncer de estómago. La infección es un factor de riesgo importante para ciertos tipos de cáncer de estómago.

Prevención

Para prevenir la infección por Helicobacter Pylori, se recomienda tomar una serie de mínimas precauciones:

  • Lávate las manos a menudo.

Sobre todo, después de ir al baño y antes de cocinar o comer. Hazlo minuciosamente, tomándote tu tiempo y utilizando agua templada y jabón. Sécate bien cuando termines.

  • Cuida tu higiene alimentaria.

Esto quiere decir que conserves, prepares y cocines adecuadamente los alimentos. También debes mantener limpia las superficies donde los cocinas y almacenas, así como los utensilios con que los preparas.

  • Sé precavido con el agua. 

Bébela solo de fuentes limpias y seguras. y aumenta las precauciones cuando viajes a países en vías de desarrollo.

  • Cuida la salud de tu boca.

Recuerda que la Helicobacter Pylori se encuentra también presente en la saliva y el esmalte dental.

Referencias

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